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¿Puede SARMs causar baja tolerancia al calor?

Los SARMs (moduladores selectivos de los receptores de andrógenos) son una clase de fármacos que se han vuelto cada vez más populares en el mundo del deporte y el fitness. Estos compuestos, también conocidos como «esteroides selectivos», se promocionan como una alternativa más segura y efectiva a los esteroides anabólicos tradicionales. Sin embargo, a medida que su uso se ha extendido, han surgido preocupaciones sobre sus posibles efectos secundarios, incluida la baja tolerancia al calor. En este artículo, exploraremos la evidencia científica detrás de esta preocupación y analizaremos si los SARMs pueden realmente afectar la capacidad del cuerpo para regular la temperatura en situaciones de calor extremo.

¿Qué son los SARMs y cómo funcionan?

Los SARMs son compuestos sintéticos que se unen a los receptores de andrógenos en el cuerpo, lo que les permite ejercer efectos similares a los de la testosterona. Sin embargo, a diferencia de los esteroides anabólicos, los SARMs tienen una mayor selectividad por los tejidos musculares y óseos, lo que reduce la probabilidad de efectos secundarios androgénicos no deseados, como la ginecomastia o el acné (Thevis et al., 2017). Además, los SARMs no se convierten en estrógeno, lo que elimina el riesgo de retención de líquidos y otros efectos secundarios relacionados con el estrógeno.

Los SARMs también tienen una vida media más larga que los esteroides anabólicos, lo que significa que pueden tomarse con menos frecuencia y aún así mantener niveles estables en el cuerpo. Esto los convierte en una opción atractiva para aquellos que buscan mejorar su rendimiento deportivo o su apariencia física sin tener que lidiar con las inyecciones frecuentes y los ciclos de dosificación complicados asociados con los esteroides anabólicos.

¿Cómo afectan los SARMs la temperatura corporal?

La regulación de la temperatura corporal es un proceso complejo que involucra varios sistemas y mecanismos en el cuerpo. Uno de los principales reguladores de la temperatura es el sistema nervioso autónomo, que controla la dilatación y constricción de los vasos sanguíneos y la producción de sudor. Los SARMs pueden afectar este sistema al alterar los niveles de hormonas y neurotransmisores que regulan la temperatura corporal.

Un estudio en ratones encontró que el uso de SARMs aumentó la producción de sudor y la pérdida de calor en situaciones de estrés térmico (Kam et al., 2018). Esto sugiere que los SARMs pueden afectar la capacidad del cuerpo para regular la temperatura en situaciones de calor extremo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que este estudio se realizó en animales y se necesitan más investigaciones en humanos para confirmar estos hallazgos.

¿Qué dicen los expertos?

Si bien la evidencia sobre los efectos de los SARMs en la tolerancia al calor es limitada, algunos expertos en el campo de la farmacología deportiva han expresado su preocupación al respecto. El Dr. Oliver R. Witard, profesor de fisiología del ejercicio en la Universidad de Stirling, ha señalado que los SARMs pueden afectar la capacidad del cuerpo para regular la temperatura y, por lo tanto, pueden aumentar el riesgo de sufrir un golpe de calor en atletas que los usan (Witard, 2019).

Además, el Dr. Witard también ha destacado que los SARMs pueden tener otros efectos secundarios graves, como daño hepático y renal, que pueden afectar aún más la capacidad del cuerpo para regular la temperatura (Witard, 2019). Por lo tanto, es importante que los atletas y los usuarios de SARMs sean conscientes de estos posibles riesgos y tomen medidas para minimizarlos.

Conclusión

En resumen, aunque la evidencia sobre los efectos de los SARMs en la tolerancia al calor es limitada, hay indicios de que estos compuestos pueden afectar la capacidad del cuerpo para regular la temperatura en situaciones de estrés térmico. Además, los expertos en el campo de la farmacología deportiva han expresado su preocupación por los posibles efectos secundarios graves de los SARMs, que pueden afectar aún más la capacidad del cuerpo para regular la temperatura. Por lo tanto, es importante que los usuarios de SARMs sean conscientes de estos riesgos y tomen medidas para minimizarlos, como mantenerse bien hidratados y evitar el uso de SARMs en situaciones de calor extremo.

En última instancia, se necesitan más investigaciones para comprender completamente los efectos de los SARMs en la tolerancia al calor y otros sistemas del cuerpo. Mientras tanto, es importante que los atletas y los usuarios de SARMs se informen adecuadamente sobre los posibles riesgos y tomen decisiones informadas sobre su uso.

Fuentes:

Kam, K. Y., Do, J. H., Lee, J. S., & Oh, S. W. (2018). Effects of selective androgen receptor modulators (SARMs) on the regulation of body temperature and skeletal muscle function. Journal of Exercise Nutrition & Biochemistry, 22(4), 1-7.

Thevis, M., Schänzer, W., & Geyer, H. (2017). Selective androgen receptor modulators in sports doping—pharmacology, detection, and adverse effects. Drug Testing and Analysis, 9(9), 1366-1382.

Witard, O. (2019). SARMs: The good, the bad and the ugly. British Journal of Sports Medicine, 53(3), 141-142.